¿Temes mis besos?
Yo los tuyos temo.
De tu mirada siento miedo,
De esas tiernas pestañas
Que se arquean al mirarme
Suntuosas, oscuras y sensuales;
De tus pupilas donde me veo
Temblando como niño sin resuello.
Temo tu voz que hace vibrar mi cuerpo,
Temo tus ademanes, tus palabras, tu silencio,
Temo el calor que emana de tu seno,
Y temo tu sonrisa que me deja sin aliento.
¿Y tú? ¿Temes mis besos?
No temas al alma pura que se entrega toda
No temas la inocencia que me mueve
La devoción que por ti siento,
¡No temas esos besos!
Que mis labios al tocar los tuyos,
Buscarán tu alma, tu corazón, tus secretos.
Así como la rosa sólo brilla cuando se abre
Y se baña en dorados rayos de vida,
Así hoy mi corazón se
ha abierto,
Y brilla con el suave candor del cielo
Que emana dulcemente tu alma divina.
Así, mujer, no temas mis besos.
Pues sólo inocencia y amor
Caben en este pecho.
Enrique Rull Suárez