miércoles, 21 de marzo de 2012

Mientras Duermes


¡Detúvose el mundo!
Calló la lira
sus notas hablaron en silencio
acunando los sueños
de la bella dormida.
Contemplaba yo su figura,
Era una Venus de mármol
que en tranquila paz dormía.
¡Silencio!
¡La diosa dormía!
¿Quién a enturbiar su descanso,
sagrado y mágico,
quién se atrevería?
Mas ¡Ay! que contener yo no podía
aquel ruido trágico
¡y despertar a la diosa temía!
Como un trueno rugía
más alto, más fuerte
cual corcel desbocado
¡no se detenía...!
¡Era el latir de mi corazón,
al mirar a la bella dormida!

Enrique Rull